martes, 9 de noviembre de 2010

Sin hurgar.


Trata a los problemas con amor, con suavidad, con mimo, y con delicadeza. Al obsesionarse con ellos, solo se consigue que crezcan, o que parezcan más grandes. Nos podemos quedar bloqueados, y los bloqueamos, entorpeciendo su solución. Del mismo modo que si tienes una herida, harás todo lo posible porque se cure, dispensándole todos los cuidados necesarios, y haciendo lo que haya que hacer. Así tenemos que actuar con nuestros problemas.Así como no hurgarías constantemente una herida, y le darías el tiempo necesario para que curase. Con los problemas haremos lo mismo. Todo lo posible para que se solucionen, pero con cariño, y dejando el tiempo necesario para que se de esa solución.
PSYSI

7 comentarios:

  1. No estoy de acuerdo ó al menos no es mi caso y me decido a comentar por primera vez porque si tengo un problema voy a por él sin desmayo y sin pausa ni descanso hasta que lo soluciono porque yo quiero estar tranquilo y relajado y por tanto problema que aparece ... ¡¡¡ a por él ¡¡¡ Sin contemplaciones y sin dejar para mañana lo que puedes hacer hoy .

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  2. No tengas tanta prisa , Manuel , que Roma no se hizo en un día .
    Calma , serenidad , tiento , paciencia , templanza , bonanza ....
    Tranquilo , hombre , tranquilo ...
    Que todo problema tiene su solución . Acuerdate de las matemáticas . Mañana será otro día .
    Y ya sabes , si tu problema tiene solución - que la tiene - no te preocupes , y si no la tiene - que al tiene - tampoco te preocupes ...

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  3. Estoy de acuerdo en que los problemas hay que afrontarlos, tampoco es cuestión de dormirse en los laureles, pero también estoy de acuerdo en no obsesionarse con ellos, creo que cuando nos obsesionamos demasiado, estamos tan metidos en el problema, que nos cuesta ver las posibles soluciones, y además una vez que haces todo lo posible, de qué te sirve seguir y seguir dándole vueltas mas que para sentirte mal.

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  4. Por más vueltas que le dés, vueltas otra vez.
    las cosas no se solucionan porque las marees, más bien se solucionan con tranquilidad.
    un problema supone estrés y ese estrés te hace tener una óptima desenfocada del problema.
    mejor espera a calmarte, duermelo, velalo, y dale un tiempo para observarlo desde fuera.
    Intenta despersonalizarlo, a lo mejor no va contigo, y tanto el motivo como la solución no depende de ti...y tu intentando reparar cuando no es tuya la solución.
    Para ponerlo en su lugar, necesitas verlo pasar por tu lado, como Confucio.

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  5. Trata a los problemas cuando surjan.
    Es decir , cuando consideres que algo es un problema pasa a serlo .
    Por tanto, no te plantees problemas antes de que surjan ...

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  6. Después de lo de ayer , sólo me queda preguntarme quien soy y también si puedo considerar que dicha cuestión es un problema en el sentido de ser ó no ser , claro.

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  7. Muchas veces los problemas no dependen de éllos mismos sino de la actitud con las que los enfrentamos y es que la valoración de los hechos es la que nos daña.

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